Pocoyo está de moda, gusta a los peques y gusta a las mamás (ya parezco un anuncio) y hay montones de productos que poco a poco van saliendo al mercado para explotar a fondo al pequeño dibujo animado de padres españoles pero inglés de adopción.

Este es uno de los libros que regalé a mi hijo por su primer cumpleaños, de los pocos que no tiene temática maquinera, que en el fondo a mi también me gustan los hierros con ruedas y motor y claro, para que le resultaran más amenos pues se los cogí ilustrados a todo color con montones de máquinas. Pero bueno, que me enrollo, de los libros de máquinas hablaré en otra ocasión.

Ahora pasemos a Pocoyo y sus libros.

DE NUEVO POCOYO

Tenemos los peluches, los dvd’s (packs 1 y 2 con cuatro dvd’s en total), las figuritas para el baño, vemos los dibus de la 2... cómo no íbamos a tener los libros de Pocoyo!!! Vamos, sería impensable no tener un librito de nuestro querido amigo azul en casa.



Evidentemente han sacado una colección de libros (más bien cuadernillos) de Pocoyo y claro, nosotros teníamos que hacernos con alguno cuanto antes. Si es que ya se me pega hasta el eslogan “Aprende riendo” y “La diversión nunca termina” Como para terminar, cuando se acaba el boom de los dibus empiezan con los dvd’s, luego sacan los peluches, los juguetes de baño, los vehículos de Pocoyo, los peluches musicales y ahora, por fin, los libros. Bueno, que conste que no es una crítica, que esto pasa con todo, cuando algo gusta o triunfa, pues nos inundan con todo tipo de merchandising, así a la americana!

Y nosotros, consumistas que somos, a fin de cuentas, caemos en las redes de Pocoyo de nuevo. Pues nada, tan a gusto de haber caído de nuevo, así que paso a hablaros del libro que de verdad que me enrollo mucho, perdón perdón...

LOS CUADERNITOS DE POCOYO: ASÍ SON Y OPINO...

Es que llamarlos libros es un eufemismo... son cuadernillos, parecidos a los de la caligrafía de Rubio (alguien no los conoce?). Quizás un poco más cuadrados, pero de tamaño y grosor muy similar.

Están editados por Timun Mas, perteneciente al todopoderoso Grupo Planeta. En realidad hay cuatro colecciones pocoyoyeras: Cuentos y Pasatiempos (el nuestro es de esta colección), Libros con adhesivos de Pocoyo, Libros con solapas de Pocoyo y Libros con texturas. Los nombres se los han currado, está claro... por favor que poca imaginación! Cada colección no tiene más que dos o tres títulos así que es fácil completarlas. Además los precios están entre los 4 y los 7 euros aproximadamente, menos mal que en el precio se han comportado.

Los libros de adhesivos y de solapas están recomendados a partir de un año, mientras que los de cuentos y pasatiempos lo están a partir de dos (se me fue un poco la mano al elegir) y los de texturas a partir de tres. Como siempre y sobre todo tratándose de libros, es algo orientativo.

Pasemos a mi libro. La recomendación de los dos años la comprendo por el grosor y la consistencia del libro. Ahora mismo es un libro ideal como merienda para Adrián porque los libros de hojas finas y blanditas se los merienda en un tris si le dejo. Evidentemente, preferimos los libros de cartón, de hojas gruesas para que las pueda pasar fácilmente y para que no le sirvan de merienda. Pero compré por Internet y no sabía muy bien cómo era el libro ni que había más oferta pocoyoyera, así que nos conformaremos con lo que hay y se lo reservaremos para un poco más adelante.

Como bien dicen en la web de Timun Mas, se basan en un capítulo de la serie y son tan simples como ésta. Son 12 páginas más la encuadernación de papel normal, no apto para comedores de papel compulsivos como Adrián. Mi libro, bueno, de Adrián, se titula ‘Pocoyo y la gran carrera’, como el capítulo correspondiente. Los otros títulos de esta pequeña colección son Pocoyo hace fotografías (corresponde a un capítulo que a mi me gusta bastante, Un misterio desconcertante) y Pocoyo juega con el paraguas (se basa en el capítulo Un día de lluvia).

Destacan las guardas, que no pegan nada con el resto del libro, porque servirían para decorar las paredes de un aficionado a Pocoyo con gustos barrocos, muy recargadas para mi gusto con cabezas de los protagonistas y pocoyos en sus típicos cuadraditos descuadrados por todas partes.

Lo demás es todo muy “estética Pocoyo”, vamos muy minimalista, blanco, fondos neutros, colores planos, sin paisajes, con juegos de sombras en las figuras y poco más. Los textos siguen la misma línea, breves, simples, fáciles de entender por los niños. Contado por nuestro ya entrañable narrador, el capítulo llevado al cuento sólo prescinde de las voces de los niños y de la aparición esporádica de Pocoyo, dejando así intervenir al niño que lea el cuento, o a sus papás en su defecto.

Las páginas finales incluyen dibujos para colorear a partir del modelo que tenemos en una esquinita. Son cuatro según la web de Timun Mas, pero a mi me han timado y me han colado una página con publicidad de los productos Pocoyo en vez del cuarto dibujo! Vamos, que si me quejaba yo de poca publicidad y merchandising, pues han dicho, ala, a Raguquita la quitamos un dibujo de colorear y la ponemos publicidad, qué majos!

Con esto se acaba el cuadernillo. Total, 3.95 euros, 3.75 si lo compráis en la Fnac. ¿Estoy conforme con la compra o volvería a comprarlo? Pues sí, la verdad, porque es barato para lo famoso que se ha vuelto Pocoyo y porque gusta bastante a los peques (bueno, y a las mamás, que a veces lo reconocemos). El libro en sí es normalito, calidad la justa, páginas y tamaño los justos... Quizás... bueno, seguro que no es el más indicado para un niño de un año, que una de dos, o se lo come como el mío o lo deshoja como otros que conozco. Pero como inversión para futuras lecturas cuando sean un poco más mayores puede estar bien. Yo, desde luego, compraré alguno más para que Adrián tenga dónde elegir cuando vaya adquiriendo un poco más de criterio literario del que ahora tiene, pobriño!

Además, sigue siendo Pocoyo, igual de tierno, bueno, sencillo, amistoso, ingenuo, explorador, deportista, curioso, etc. etc. y todos los buenos calificativos que se os puedan ocurrir para un niño. Sus historias siempre me gustan, transmiten sólo lo bondadoso, lo alegre y lo bonito... y aunque el mundo no siempre será de color de rosa, para los niños debe serlo siempre. Así que son los libros perfectos para leer o enseñar a mi hijo, igual que los dibus de la 2.