Historia de un Pedro cualquiera (Pablo de la Cruz)


Este es el segundo libro que leo de Pablo de la Cruz. Seguramente este escritor os sonará poco pero en mi pueblo es bastante conocido porque está casado con una chica de aquí, así que a menudo viene y nos lo encontramos por la calle, digamos que es un “escritor asequible”. Quizás si no fuera de aquí, como quien dice, no me hubiera fijado nunca en sus libros, pero así se les ha dado bastante publicidad y, además de presentarlos en ciudades como Madrid o Valladolid, también lo ha hecho en este pequeño pueblo palentino en el que vivo. Por otra parte, nos mantiene informados de sus nuevas publicaciones y presentaciones por e-mail así que como digo, es un escritor cercano.

Su primer libro, el otro que he leído, titulado ‘’’La realidad y otras mentiras’’’, me gustó mucho, me pareció una historia sencilla pero llena de ternura y además se desarrollaba en pueblos y ciudades de aquí, de Castilla, con lo que el relato tenía aún más cercanía para mi. Le cogí mucho cariño a este libro. No os hablo sobre él ahora porque se lo he prestado a una amiga... a ver si ella se decide a leerlo y os cuenta sus impresiones. También os digo que me gustó más que este otro sobre el que os voy a hablar, quizás por el tema, que es más agradable, aunque en ambos haya mucho de crítica social a la realidad desoladora de los pueblos castellanos. Os cuento un poco más sobre el autor y su obra.



== Pablo de la Cruz y su obra ==

Nació en 1969 en Baracaldo (como mi raguquito) y además de escritor es Ingeniero de Caminos y Puertos. Ha viajado por toda Europa y ha trabajado unos meses en Alemania. Actualmente compagina su labor de escritor con su trabajo en la empresa Begar. Sus libros están escritos a lo largo de varios años, desde su juventud, y fue su mujer (mi paisana) la que le animó a publicarlos. La editorial Entrelíneas Editores ha sido la responsable de sacar a la luz sus novelas.

Hasta el momento ha escrito una tetralogía que ha denominado “Nosotros”, aunque creo recordar que son siete libros los que Entrelíneas le va a publicar. De momento, como digo, podemos leer cuatro:

· La realidad y otras mentiras (2005)
· Historia de un Pedro Cualquiera (2006)
· Nocturnos de Cuerda Soledad (2007)
· El Hijo Pródigo (2008)

Pablo de la Cruz ha englobado estos cuatro relatos dentro de un mismo esquema temático. No es el argumento en sí el que repite el esquema sino el trasfondo, ya que los cuatro libros están dedicados a las gentes castellano leonesas. Además, al menos en los dos que he leído, y sé por referencias que en los otros dos también, hay tintes autobiográficos.

Cada libro de esta serie o tetralogía está dedicado a un grupo social representativo de las tierras castellanas: el primero, ‘La realidad y otras mentiras’ es un relato costumbrista sobre la tercera edad y los jubilados en el medio rural. ‘Historia de un Pedro Cualquiera’ se mete de lleno en la atormentada mente de un adolescente que vive en una capital provinciana, casi un pueblo grande. ‘Nocturnos de Cuerda Soledad’ recoge los monólogos de un discapacitado, mientras que ‘El Hijo Pródigo’ vuelve los ojos a su primera novela, ya que trata sobre un matrimonio joven en el que él es hijo de los protagonistas de ‘La realidad y otras mentiras’.

== Ficha técnica ==

Título: Historia de un Pedro Cualquiera
Editorial: Entrelíneas Editores
Fecha de edición: abril de 2006
Número de páginas: 135
ISBN: 84-9802-394-7
Precio: 13 euros

== Y... ¿de qué va? ==

Pues es un libro raro, raro... y es que el argumento no tiene mucho que contar: Un adolescente que vive en una pequeña ciudad de provincias encuentra un libro en un contendor y a través de su lectura nos va desvelando sus inquietudes, sus miedos, sus dudas... Lo raro del libro es que parece que quien lo cuenta es un amigo del adolescente y, sin embargo, hay pasajes del libro que desvelan con tanta profundidad los pensamientos de Pedro que es imposible que lo narre un amigo... es como si Pedro nos contase su historia en tercera persona.

Pedro vive con su padre y sus hermanas, Luz y Olvido. Su madre murió hace un tiempo debido a una enfermedad, suponemos que un cáncer. Su padre vive constantemente borracho y no se ocupa especialmente de sus hijos. Pedro vive encerrado en su propio mundo, vaga errante por la vida, por su casa, por la pequeña ciudad en la que vive, por la escuela, relacionándose cada vez con menos gente y dedicándose simplemente a sus pensamientos, casi siempre oscuros.

En uno de sus paseos por la orilla del río encuentra un libro abandonado en un contenedor. Pedro es un gran amante de los libros y lo recoge horrorizado por encontrarlo ahí.

El libro cuenta la historia de Hillary, una chica de papá que vive de fiesta en fiesta, y de Johnny Cubeto (sí, un nombre bastante ridículo), un funcionario que harto de sus rutinas y su vida monótona decide romper e innovar... Sus destinos parecen no confluir pero el final de la novela nos sorprenderá, a nosotros y a Pedro.

Alternando la lectura de la novela (siempre desde el principio del capítulo, una manía de Pedro) con sus propias divagaciones, vamos descubriendo la complejidad de Pedro, sus fantasías sobre la vida sexual de su hermana, su inocencia a pesar de todo, su negativa a entablar ni siquiera conversación con sus semejantes... La vida le ha ido dando pequeños golpes que le han ido aislando poco a poco. No han sido situaciones tan tremendas pero su mente de adolescente las ha magnificado hasta convertirle en una persona tremendamente introvertida y aislada. Ni siquiera los buenos recuerdos, como el primer beso con Lucía, nos dejan un buen sabor de boca.

Pedro es un chico desorientado que se guiará en sus pensamientos por esa novela abandonada, bastante mala por cierto, que odia y le atrae al mismo tiempo. Cuando la novela desvele su trágico final también llegaremos al final de la breve historia de este Pedro, que no es cualquiera, como leemos en el título, es complejo y gris.

== Un libro complejo ==

Pablo de la Cruz ha contado alguna vez que escribió esta novela con 21 años. Fue su primer libro, aunque se haya publicado en segundo lugar, y narra un periodo de la vida que él acababa de pasar.

Sinceramente, creo que mi adolescencia fue de color de rosa si Pablo de la Cruz se inspiró en la suya para escribir el libro. El personaje de Pedro me ha parecido tan complejo, gris, incluso oscuro... no me imagino a muchos chicos de hoy en día así, abstraídos, introvertidos al límite, casi depresivos. Supongo que los habrá pero no creo que sean “un pedro cualquiera” sino gente con verdaderos problemas.

Si la primera novela publicada de Pablo de la Cruz, “La realidad y otras mentiras”, me encandiló por su sencillez y por la cercanía de la situación que narra, ésta me ha abrumado por su complejidad... Y no digo que no me haya gustado, sí, me ha gustado, me ha sorprendido por lo diferente del estilo narrativo, por la complejidad de la mente adolescente que Pablo ha trazado. Pero es compleja, no se lee fácilmente, ni te despierta sonrisas, ni te llama la atención saber el final, porque no es un final que guste y además te deja con dudas.

La historia de la novela abandonada tampoco es sencilla, es una mirada futurista con un hombre anodino como protagonista. No logras, qué digo identificarte, ni siquiera acercarte por medio de la empatía ni a Johnny ni a Pedro, aunque ellos parecen estar muy cerca el uno del otro.

Está dividido en capítulos cortos pero esto no facilita la lectura. Además tiene la singularidad de que en muchos de ellos, el comienzo del capítulo de la historia de Pedro coincide con el inicio de otro capítulo en el libro abandonado, por lo que empezamos leyendo: Capitulo 8, Capítulo 6... un lío de capítulos vamos.

Una singularidad más de este libro es la de los tipos de letra que utiliza, algunos un poco complejos de leer. Para la historia futurista del libro abandonado usa un tipo de letra también un tanto futurista que se lee mucho peor que el resto de la novela. Cuando Pedro nos lee alguno de sus poemas usa una letras más acorde, tipo “escrito a mano”, pero tampoco ayuda mucho a la lectura.

Algo que le va muy bien al libro es la portada, aunque no sé si realmente está elegida a propósito o es simple casualidad ya que he visto en el catálogo de Entrelíneas más libros con portadas que utilizan cuadros de Edvard Munch. En este caso es la famosa pintura “El grito” la que ilustra la portada y a mi me ha parecido un resumen visual del libro, totalmente acertada a pesar de ser un cuadro tan conocido y quizás tópico. El grito de Munich es ese lamento silencioso pero terrorífico que parece acabar con el ser que lo produce, alejado del resto del mundo y situado en un espacio precario. El libro es eso mismo, un grito, un lamento silencioso de un adolescente que no puede presagiar nada bueno, sólo un final próximo y lamentable, apartado y olvidado pero por él mismo.

Es un poco difícil decir si recomiendo o no el libro, lo mismo que dudo cuando digo que me ha gustado. Sí, me ha gustado porque es diferente a mucho de lo que he leído, pero como digo es complejo, es oscuro, es reflexivo y no genera empatía, en ninguno de sus personajes. Sobre la recomendación diría que sí, leedlo, es un autor poco conocido que merece una oportunidad, pero no os quedéis sólo con este libro, buscad su primera novela para comparar y ver la diferencia en su estilo narrativo y en su manera de crear historias conmovedoras tan buenas como rara y reflexiva es esta otra. Si “La realidad y otras mentiras” se lee en una tarde, “Historia de un Pedro cualquiera” necesita varios días de lectura pausada, y eso a pesar de tener un número de páginas muy parecido. Creo que con esto resumo un poco las diferencias entre ambos libros.

No Response to "Historia de un Pedro cualquiera (Pablo de la Cruz)"