Vale. Se acabó. Paren los rotativos. He llegado a mi punto de saturación máximo con el 'chick lit'. Este género literario está en crisis y va abocado al desastre a menos que alguien le ponga remedio. A este paso se tendrá que crear una comisión reguladora de 'chick lit' para decidir qué libros salen al mercado y qué no, porque esto está adquiriendo tintes caóticos. Siempre he sido una defensora a ultranza de este género y, desde que pasé a formar parte del segmento de mercado al cual van dirigidas las novelas que engloba, he sido una consumidora en potencia de libros de este estilo. Pero todo tiene un límite, y yo he llegado al mío.
Para resumir 'grosso modo' en qué consiste el 'chick lit', se podría definir como un género literario escrito por y para chicas en la veintena o en la treintena cuyas novelas abordan la vida de chicas en esa misma franja de edad que buscan el éxito profesional, el amor y el reconocimiento social. La particularidad y elemento principal de estas novelas es que estas heroínas modernas son personajes con los cuales es muy fácil identificarse porque son muy reales, cometen miles de errores y sus metidas de pata están tratadas con mucho humor. Siempre recurro al mismo ejemplo para ilustrar mi descripción: "El diario de Bridget Jones" fue uno de los pistoletazos de salida. El 'chick lit original' responde a los patrones citados. Luego vinieron las 'pervertidoras' del género que se dedicaron a copiar el esquema pero cambiando a las protagonistas, que pasaron de ser los adorables 'walking disasters' [desastres con patas] originales a pijas y ricachonas que rompían por completo la esencia del género.
Es aquí cuando la cosa empezó a degenerar ya que los libros 'chick lit' empezaron a proliferar como setas: era un género en auge, que tenía éxito y que respondía a unos esquemas muy concretos, lo cual propició que muchas autoras se apuntaran al carro pensando que escribir un libro del género era cosa de niños. Hace ya tiempo que empecé a observar una bajada en la calidad de estos libros por culpa de: a) Las autoras pervertidoras del género b) Las autoras copionas que, encima, copian mal c) Las autoras 'Voy a sacarme un dinerillo escribiendo un 'chick lit' de esos que está chupado' y d) Las autoras españolas que quieren ser Sophie Kinsella en versión autóctona. [Sophie Kinsella es una de la reinas anglosajonas del género]. Pues bien: yo soy un animal de costumbres y tengo la virtud de tropezar en la misma piedra no dos veces sino diez. Así que, a pesar de haber dicho muchas veces: "No voy a leer más 'chick lit' por una temporada", siempre acabo reincidiendo. Pero hasta aquí hemos llegado.
CHICK LIT A LA ESPAÑOLA
El 'chick lit' es un género original de autoras anglosajonas. Con el tiempo las barreras se han caído y se ha internacionalizado. En España también tenemos 'chick lit' nacional que intenta hacerse su hueco. Por norma general suelo desconfiar del 'chick lit' autóctono. Muchas veces pasa que despreciamos lo propio y admiramos lo ajeno. En este caso no es porque crea que lo de fuera es mejor, sino que mi recelo responde a una cuestión de saber hacer. El 90% de libros de este género son de autoras anglosajonas y sus historias están localizadas mayoritariamente en Londres, Nueva York, Manhattan y localidades similares. La caracterización de las protagonistas suele tener rasgos y costumbres típicas de los países en los que se desarrolla la acción, lo que provoca que, para el lector español, sea difícil identificarse con eso aunque no es nada insalvable.
Lo que pasa cuando hacen 'chick lit a la española' es que pretenden emular a las autoras anglosajonas pero eliminando todo rasgo extranjero y plagando el libro de clichés españoles. Y les sale mal porque se ve forzado, lleno de tópicos y te da la sensación de estar leyendo un "quiero y no puedo". Quieren españolizar tanto el libro que acaba siendo una parodia de los libros extranjeros cuando lo que pretende es ser un equivalente. He leído bastantes libros de "chick lit a la española" y, por lo general, no me han convencido. Y no es que no me identifique con una protagonista que va a Zara, viaja en el metro, ve "TeleCinco" y compra en Carrefour: es que con eso no es suficiente para tener una buena historia. Sin ir más lejos, uno de los personajes más perfectos que ha dado el 'chick lit' es (en mi opinión) Emma Corrigan, protagonista de "No te lo vas a creer", la mejor novela de Sophie Kinsella. A pesar de ser 'extranjera', es totalmente internacional, creíble y cercana. Además, tiene todos los elementos del chick lit más puro: es una Bridget Jones en versión veinteañera.
SABRINA: 1 EL MUNDO: 0
"Sabrina: 1 El mundo: 0" es un libro de 'chick lit' a la española. Tuve muchos reparos en comprarlo. Hace poquísimo que ha salido a la venta pero yo ya lo había visto publicitado. El gancho que usan para promocionarlo es, precisamente, el hecho de ser 'chick lit' español. No faltan los símiles comparativos con Bridget Jones, Sexo en Nueva York y demás obras conocidas del género (también conocido como "literatura para chicas"). Ya la portada llama la atención porque es de un rosa chillón que se ve a distancia y tiene un dibujo moderno con una chica en la portada (típico de estos libros). En todas partes hacen especial hincapié en que es 'chick lit' a la española y que se aleja de los estereotipos anglosajones de los que muchas veces pecan estas novelas.
Está publicada bajo el sello de 'Esencia Editorial', que ha sacado toda una cartera de libros de este género y ha decidido incluir también a autoras españolas para dar apoyo al 'chick lit' autóctono. Según dicen, quieren que se superen los prejuicios que tenemos nosotros mismos hacia las novelas de este género escritas por españolas. Yo no sólo no los he superado sino que los he acrecentado. A partir de ahora huiré del 'chick lit' español como de un tiburón hambriento. Le he dado muchas oportunidades y me he encontrado con auténticos sopores. El símil con 'Bridget Jones' es un recurso muy trillado para vender un libro de este género. No os dejéis engañar: no todo lo que lleva el sello Jones es bueno.
"Sabrina: 1 el mundo: 0" es un libro que te venden como la promesa de oro de la literatura 'chick lit' española: el libro que se convertirá en la Biblia de dicho género 'made in Spain'. La novela prodigio. El 'no va más'. Pues bien: para los que estéis leyendo esta opinión en busca de información sobre si comprar la novela o no, debo decir que hablo desde mi experiencia personal y, por lo visto, voy al revés de todo el mundo porque parece que ha hecho las delicias de las lectoras españolas ávidas de 'chick lit' de chicas Zara. Si sois lectoras habituales del género, no hace falta que leáis este libro porque ya lo habéis leído. Si sois lectoras ocasionales y no sois muy exigentes puede que os guste. O puede que, independientemente del grupo al que pertenezcáis, simplemente os encante.
* ¿De qué va el libro?
La novela cuentas las peripecias de Sabrina, una chica de 26 años que trabaja como creativa en una agencia de publicidad. Comparte piso con dos chicas, es adicta a comprar en Zara, llega a fin de mes con números rojos en el banco y se siente frustrada tanto en el tema personal como profesional porque tiene la sensación de que su vida no va a ninguna parte. Un buen día decide ponerse las pilas y ser la número uno en su trabajo, pero es perezosa y le pasa lo que a mucha gente: tiene la vocación pero no la voluntad. Un golpe de azar creativo hace que saboree las mieles del éxito pero todo se queda en un espejismo que le da un bofetón de realidad y la vuelve a desilusionar con su trabajo. Mientras se entera de 'tejemanejes' de oficina, puñaladas traperas laborales y corrupciones de altas esferas del poder, intentará encontrar al amor de su vida, prosperar y llegar a algún sitio que valga la pena.
* ¿Tiene los elementos que debe tener toda novela 'chick lit' que se precie?
Sí, por supuesto. Veamos… tenemos a una protagonista entre los veinte y los treinta, que está confusa y no sabe qué hacer con su vida, se nos presenta como la típica vecina del quinto, es un desastre con patas, nada le sale bien, etc. También está el tema del trabajo (la protagonista no se siente satisfecha ni realizada, aspira al reconocimiento profesional, quiere llegar a alguna parte, superarse a sí misma, llegar a lo más alto, ser la mejor y todo eso). Por supuesto también está el tema del amor (o la falta de él): una protagonista sin novio, soñadora, romántica, idealista, que busca a su príncipe encantado. ¿Tenemos al jefe tío bueno? Lo tenemos. ¿Tenemos a la mamá pesada que cree que su hija no hace lo correcto? La tenemos. ¿Tenemos a las amigas de personalidades variopintas? Sí. ¿Tenemos humor? Sí. La lista de la compra con los ingredientes necesarios está hecha. Otra cosa es saber cocinar el plato.
Pero… si tiene los elementos correctos, ¿dónde está el problema?
* La novela está repleta de tópicos, pero españolizados. Es el problema que tienen estas 'chick lit' a la española, que para demostrar que son españolas tienen que sacar todo el repertorio 'typical Spanish' y meterlo sea como sea. Zara, "Bar Manolo", Mango, Paseo de la Castellana, patatas bravas, Anita Obregón, TeleCinco, revista Cuore, Carrefour, Día... Es como si te quisieran decir: "¿ves como soy una novela española?". Es decir: cogen todos los tópicos de las novelas anglosajonas y los españolizan. El problema es que las anglosajonas no quieren demostrar nada y, si sale a colación un elemento o costumbre de allí, sale de forma natural y espontánea. Aquí, en su empeño por demostrar que la novela es 'chick lit a la española', atiborran la historia con elementos patrios y acaba por cansar.
* Otro problema (el más importante): el gancho (en este caso, la falta de él) Es un libro que no engancha. El punto de partida es simplón (típico de estas novelas, para qué nos vamos a engañar) aunque eso no es nada malo. Casi todas parten de la misma base, lo interesante es ver cómo se desarrollan. En este caso, la idea es buena, los personajes abarcan todo el repertorio de personalidades, la prosa de la autora es ágil, hace descripciones de la vida real muy acertadas (hay una escena de supermercado muy divertida) pero la historia no engancha (por lo menos, a mí no). Si a eso sumamos que ya la has leído y visto 1000 veces, pierde toda la motivación que aún pudiera tener. Otro problema es que el libro es demasiado largo (524 páginas). Es un problema que tienen muchas novelas: son buenas pero son tan largas que acaban haciéndose pesadas. Este libro, más corto, habría ganado puntos. Es que se tira 200 páginas para contarte que la protagonista está quemada con su trabajo y que, de golpe y porrazo, se plantea realizarse y ser la mejor. Yo pasaba las páginas con mucho esfuerzo y eso es lo peor que me puede pasar al leer un libro.
* Por otra parte, la protagonista de este libro es una borracha, otro recurso trilladísimo del que abusan muchas autoras. Pero no es que trate el tema del alcoholismo. No: es que la tía simplemente es de la generación 'juventudes borrachuzas' cuyo lema es: "No sin mi botella". Ha tenido un mal día, bebe. Va a una fiesta de empresa, cogorza al canto. Fiesta en casa con sus amigas, cebollón que se pilla. Sale a cenar con sus colegas, borracha perdida. Cena en un restaurante pijo: espectáculo con sus amigas en plan 'ay tía que cuando bebo no tengo vergüenza ni dignidad'. Eso puede dar para una escena más o menos divertida (vuelvo a citar a Emma Corrigan otra vez: en el caso de esa novela el punto de partida es una pequeña cogorza pero tratada de un modo muy certero), pero cuando la tía y sus amigas se pasan la mitad del libro borrachas perdidas, la cosa carga. Si es que hay veces en las que las páginas huelen a alcohol antes de que éste haga acto de presencia. Los personajes no provocan mucha empatía.
* El final es típico también de estos libros (aunque no molesta porque ya sabes a lo que vas). La historia es un viaje por la vida de Sabrina que irá creciendo, madurando, descubriéndose a sí misma mientras mete la pata y viendo el lado feo y amable de la vida. Un proceso de aprendizaje vital y búsqueda de uno mismo. Vamos: lo de siempre (que no es malo; cuando lees una novela de estas lo que buscas es eso). En definitiva es un copia, pega, traduce y aliña con salsa española de otras autoras. A estas alturas del partido es muy difícil dar el pelotazo y hacer algo distinto que rompa moldes (aunque Emily Giffin lo consiguió en "A prueba de bomba"). Aún y así, se pueden hacer cosas divertidas. El trabajo de documentación está muy bien hecho: más que nada es que la autora trabajó como creativa en una empresa de publicidad, de modo que conoce al dedillo todo lo que se cuece por allí. Pero el libro es más de lo mismo de lo de siempre.
¿RECOMENDADA?
A ver: si sois lectores habituales de este género y habéis leído muchas novelas, no hace falta que leáis este libro porque ya lo habéis leído. Tiene los tópicos que ya hemos visto, recurre a los clichés típicos del género, etc. ¿Es malo? Malo no es. Cuando pienso en 'chick lit' malo se me vienen otros títulos a la cabeza. Pero a mí no me ha parecido nada del otro mundo porque he leído muchísimo 'chick lit' y no he encontrado nada innovador ni diferente en este libro. No lo defino como bueno tampoco. Los que sean lectores ocasionales es posible que lo disfruten, pero yo ya no puedo más con tanto 'chick lit' en el mercado: es como estar leyendo la misma historia una y otra vez pero con diferentes personajes de diferentes vidas.
No me ha enganchado y su lectura no se me ha hecho ligera y amena sino lenta y pesada. Como ya he dicho, es un libro demasiado largo que no tiene un argumento con ritmo que haga que la historia avance por sí sola. Se me hizo bastante lento y pesado. Es la primera novela de esta autora y se nota: tiene las ideas, pero no las sabe desarrollar. Ni lo recomiendo ni lo dejo de recomendar: prefiero que cada uno saque sus propias conclusiones y decida si le interesa o no. Pero yo, si tuviera que aconsejar a alguien que quisiera leer 'chick lit' y me pidiera consejo, le recomendaría otros títulos. Le doy dos etrellas aunque "malo" no me parece. Simplemente es uno más.
DATOS EDITORIALES
Título: "Sabrina: 1 - El mundo: 0"
Autora: Rebeca Rus
Editorial: Planeta
Colección: Esencia
Año de publicación: 2008
Nº de páginas: 525
ISBN: 978-84-08-07612-4
Precio: 16 €
2 Response to Sabrina: 1 - El mundo: 0, Rebeca Rus
pos este libro me ha encantao es una pasada mola un mogollon
yo personalmente me he leido un monton de libros pero nunca me habia encontrado con una novela tan original es de lo mas se la recomiendo a todo el mundo y espero k la autora se anime a por el siguiente
venga Rebeca espero el siguiente con impasiencia. k sepas k voy a estar pendiente del proximo. ánimo
Si bueno...me parecia entretenido, pero la protagonista es una absoluta borracha!!! y no creo que haya nadie en la tierra que pueda beber lo que bebe en el libro, quien esta jodida en la cama llorando y a la vez chupandose una botella de vozka to borracha durante 3 dias? venga ya y eso es poco con lo que dice tragar en el libro..vamos que me daba angustia de imaginarlo....!!!!! :S:S:S
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